

Para los artistas el mar es una fuente de inspiración; para los biólogos, de estudios y para la inmensa mayoría de la gente un lugar en el que buscan refugio los secretos, asociado con la paz y las vacaciones. Sin embargo, para los marineros el mar es el espacio donde la vida cobra sentido. Un sentido que en la novela de Herman Melville se llamó Moby Dick y se volvió una obsesión.
El premio cuenta con una dotación de 12 000 euros en concepto de derechos de
autor, para aquella persona o equipo capaz de reinterpretar un cuento clásico,
leyenda o personaje mítico bajo las leyes del álbum ilustrado. Este año, la
historia del capitán Ahab y la gran ballena blanca se han llevado la atención y
el elogio de los jueces. Ahora solo queda esperar el dictamen de los lectores,
que hallarán en la obra nuevas claves para interpretar el misterio de quién es
y qué significa Moby Dick.